La distorsión de la extorsión

Rica, veleidosa, mezquina, la ciudad de Buenos Aires le dio la espalda a una lógica política. En las elecciones del domingo hizo oídos sordos al presupuesto según el cual una jurisdicción debe juntar los tacos ante el poder institucional superior para encaminarse rumbo al progreso y el bienestar. Poco original, en esa línea había avanzado la