Deuda: el viejo ruin que le come el plato al nieto

El problema de “la deuda pública” empieza por llamarle “deuda pública”. Miles y miles de familias honestas entienden, desde ese nombre, que la deuda debe ser honrada, si su condición de decencia se los marca desde el fondo de los tiempos.Pero el nombre verdadero y oculto es “fraude privado”, y desde allí se puede hablar con mayor precisión. Los